28 de enero de 2013

Bicentenario de la publicación de Orgullo y Prejuicio

Jane Austen permaneció en la más absoluta sombra mi vida entera, hasta hace alrededor de dos años atrás. En ese entonces ocupaba mi tiempo en un foro que abandoné bastante pronto, puesto que lo que en primera instancia parecía un espacio para los amantes de la lectura, era en realidad exclusivo para lectores de clásicos, y aún más exclusivamente para los lectores de Jane Austen.

La inmensa atención que prestaban a esta escritora inglesa logró despertar en mí una igualmente inmensa curiosidad, y me decidí, después de meditarlo hasta un millón de veces, a darle una oportunidad y leer algo suyo. Y aunque aún no la he leído, la novela que me ayudó a dar el último paso fue Orgullo y Prejuicio.

Un día como este, hace doscientos años, una dama, autora de la reconocida novela Sentido y Sensibilidad, publicaba por un precio bastante inferior la que sería su obra más emblemática, Orgullo y Prejuicio. Admito que en un principio subestimé mucho a la autora, y no fue hasta que probé su pluma que me convencí de que Austen no escribe historias románticas: son una sátira, una crítica de la sociedad sutil, su visión del rol ideal de la mujer en la sociedad y el que realmente asumía en sus tiempos, la época de la Regencia.

Para conmemorar la publicación de la obra más famosa de Jane Austen, que logró cautivar incluso a alguien que siempre ha gustado sólo de lo masculino, quiero mostrarles mi edición de Orgullo y Prejuicio, que con mucho trabajo duro logré comprar, y que tiene mucho valor sentimental para mí por un motivo que contaré en otro minuto.

Mi libro es la edición tapa dura con cubierta de tela de la famosa editorial Penguin, de la colección diseñada por Coralie Bickford-Smith. Lo compré a través de Buscalibre, ya que lamentablemente la gama de libros en inglés aquí no es muy amplia. Tenía muchas ganas de tener esta edición, que según averigüé y luego pude comprobar, es muy completa y tiene mucho material suplementario. Sin más rodeos, los dejo con las fotografías.

Siempre había pensado por las fotografías que sólo parecía estar revestido en tela, pero al tenerlo en mis manos y apreciar su textura, noté que en efecto es tela.

La sencilla y elegante portada de la novela.



Un guiño a la primera publicación, que me pareció muy bonito de parte de la editorial.




Aquí comienza el material suplementario una vez finalizada la novela. La nueva introducción y una pequeña cronología de la vida y obra de Jane Austen se encuentran al principio del volumen.


En conjunto, es uno de mis tesoros literarios, y muy pronto me perderé entre sus páginas. Admito que el hecho de que esté en inglés me hace pensar que la lectura irá cuesta arriba muchas veces, pero posee además un completo glosario con términos de la época.

Django Unchained

Siempre he tenido a Quentin Tarantino como en un pedestal. La primera vez que vi una de sus películas tenía unos ocho o nueve años, y cuando le conté a unos compañeros de curso en el colegio lo que había visto mientras pasábamos las páginas de una revista de cine que estábamos recortando, vi unos cuantos pares de ojos posados en mí con extrañeza, seguido de un silencio incómodo.

Cuando vi Inglourious Basterds hace unos años, subió al primer puesto de películas favoritas de todos los tiempos más rápido que un globo de helio, y aunque he visto muchas películas que me han encantado en los años siguientes, no la han sacado de lugar. Es, por lo tanto, comprensible que estuviese esperando con ansias la nueva película de este reconocido director.

Lo planeamos todo con mi padre sin decirle una palabra a mi hermana. Tuvimos nuestra salida padre e hijas habitual, comimos en un restaurant de comida rápida y conversamos mientras mi hermana aprovechaba un regalo que mi padre le ofreció, quizás como una forma de decir por adelantado que no íbamos a tomar en cuenta su opinión. Así pues, cuando se acercó la hora de la función que habíamos planeado ver, compramos entradas para Django Unchained.

¿Cómo lo pasó mi hermana? Podría decirse que la mayoría de la función fue pirata, porque no creo que tuviera los dos ojos al descubierto. Sí, noté que disfrutó en algunas partes, pero se nota que no se acostumbró de pequeña a que papá le mostrara cosas de hombre, y ella sólo se quedó con los dibujos animados.

Sinopsis
Situada en el sur, dos años antes de la Guerra Civil, la historia se centra en Django, un esclavo cuya brutal historia con sus antiguos propietarios lo lleva cara a cara con el caza-recompensas nacido en Alemania, Dr. King Schultz. Schultz sigue el rastro de los hermanos asesinos Brittle, y sólo Django puede llevarlo a su recompensa. El poco ortodoxo Schultz, adquiere a Django con la promesa de liberarlo de la captura de los Brittles – muerto o vivo. El éxito hace que Schultz libere a Django, aunque ambos deciden no ir por caminos separados. En vez de eso, Schultz busca a los criminales más buscados del sur, con Django a su lado. Perfeccionando sus habilidades vitales de caza, Django permanece concentrado en un objetivo: encontrar y rescatar a Broomhilda, la esposa que perdió durante la trata de esclavos tiempo atrás.

Opinión Personal
Quien haya visto alguna película de Tarantino sabrá de sobra que una de sus primeras características como cineasta es su uso sin tapujos de la violencia y la sangre. Iba preparada, por supuesto, pero no para lo que me iba a encontrar. Porque si este señor hizo películas sanguinarias antes, Django las supera a todas sin siquiera cansarse.

La historia de un esclavo negro que busca su venganza me pareció increíblemente atractiva; el tema de la venganza siempre me ha interesado mucho, por diversos motivos. No sin una buena dosis de humor, entre negro y absurdo debo decir, la historia comienza con la violenta liberación de Django y el inicio de sus relaciones con Dr. King Schultz, un caza-recompensas bastante peculiar, interpretado por el genial Christoph Waltz, que es uno de mis actores favoritos en todo el universo y objeto de mi más fiel adoración.

El camino que ambos recorren los lleva desde el asombro de la gente, que jamás han visto un negro a caballo, pasando por la increíble rapidez con las balas de Schultz y su insólita manera de salir de las situaciones más peligrosas valiéndose de su nacionalidad y de las palabras. Django, que ha sido maltratado de las maneras más crueles imaginables, y no sólo de forma directa, encuentra el gusto en este asunto de matar blancos, y además ser pagado por ello, por lo que se une a Schultz en su trabajo y se convierte en un ágil pistolero y caza-recompensas negro.

La película en general, como ya es costumbre de Tarantino, es multipolar. Con esto quiero decir que en un segundo uno está riendo con alguna escena hilarante, y al siguiente está al borde del asiento en medio de un tiroteo sumamente gráfico y cargado de acción. El último cuarto está sin duda cargado de mucha más acción, y de una brutalidad a otra llegamos a un final que me resultó simplemente genial. En varias escenas el corazón me saltó de la impresión, y en otra lo tenía retorciéndose en su lugar, y agradezco que las salas deban siempre estar oscuras, porque así nadie reparó en mi expresión de ataque cardíaco.

En resumen, no pude haber salido más contenta, más llena de adrenalina y satisfecha de haber pasado dos horas y tanto en algo que disfruté como nunca. Me encariñé de manera especial con Dr. King Schultz, porque es un personaje curioso, como los que siempre suelen gustarme, y porque creo que el hecho de que Christoph Waltz lo interprete de por sí gana todos los puntos habidos y por haber. El resto de los actores me parecieron igualmente brillantes, pero en este aspecto voy a permitirme ser completamente subjetiva.

Destaco también la banda sonora, porque la música es sencillamente estupenda, contando con canciones de diferentes estilos musicales y altas dosis de Ennio Morricone. Sin duda ha pasado a mi ranking personal de películas favoritas, a la par de Inglourious Basterds (si alguien se pregunta cuál es el segundo lugar, me atrevería a decir que es True Grit) y se la recomiendo a cualquiera que, a diferencia de mi hermana y me vengo a enterar recién hoy, no tenga fobia a la sangre. La próxima vez creo que me sacrificaré y dejaré que ella escoja la película.

Si una noche de invierno un viajero, de Italo Calvino


Lo descubrí en TVTropes, y lo único que decía de él en el trope que estaba revisando era: tú eres el protagonista de Si una noche de invierno un viajero, de Italo Calvino. Releí la línea, intrigada por lo que querrían decir exactamente aquellas ambiguas palabras, y hoy, después de una lectura más fragmentada de lo que tenía pensado, he terminado su lectura.

Esta cortísima novela estaba en mi lista de lecturas siguientes, pero en absoluto la había programado tras finalizar Papaíto Piernas Largas. Fue más que nada su brevedad lo que me hizo adelantarla varios puestos y darle prioridad, pensando que si era lo que estaba esperando, alguna especie de novela interactiva pero no exactamente, lo terminaría muy pronto.

Al final, me ha tomado mucho más tiempo del que tenía planeado. Siento como si hubiese leído unas diez novelas diferentes, una tras otra, cuando en realidad sólo ha sido una pequeña novela increíblemente curiosa y poco conocida, que es más de lo que aparenta.

Sinopsis
«La empresa de tratar de escribir novelas apócrifas, que me imagino escritas por un autor que no soy yo y que no existe, la llevé a sus últimas consecuencias en este libro. Es una novela sobre el placer de leer novelas; el protagonista es el lector, que empieza diez veces a leer un libro que por vicisitudes ajenas a su voluntad no consigue acabar. Tuve que escribir, pues, el inicio de diez novelas de autores imaginarios, todos en cierto modo distintos de mí y distintos entre sí: una novela toda sospechas y sensaciones confusas; una toda sensaciones corpóreas y sanguíneas; una introspectiva y simbólica; una revolucionaria existencial; una cínico-brutal; una de manías obsesivas; una lógica y geométrica; una erótico-perversa; una telúrico-primordial; una apocalíptica alegórica. Más que identificarme con el autor de cada una de las diez novelas, traté de identificarme con el lector…»

Opinión Personal

Las sensaciones que me dejó la primera novela de Calvino que leo es bastante extraña. Por un lado, fue un auténtico dolor de cabeza, aunque no por esto digo que no lo haya disfrutado; es de ese tipo de libros densos, o que por lo menos a mí me lo pareció, pero que a simple vista aparenta ser simplemente una novela entretenida para pasar una tarde.

La historia comienza cuando el Lector, que acaba de comprar la nueva novela de Italo Calvino, Si una noche de invierno un viajero, llega a la comodidad de su hogar a disfrutar de la lectura y tras sumergirse en la apasionante historia, descubre una falla en su volumen y va a cambiarlo por uno bueno a la librería al día siguiente. Allí no sólo se lleva una sorpresa cuando el vendedor le explica que el libro que leía tiene otro título y pertenece a otro autor, sino que descubre a una Lectora que ha tenido el mismo incidente y a quien se acerca, tratando de tender un puente entre ambos. La narración es en segunda persona, lo que no es muy común, pero hasta aquí todo bien.

El Lector, que en un principio sólo desea leer la novedad, termina en una loca carrera por terminar alguno de los libros con los que se topa, que tienen la mala suerte de permanecer incompletos o desaparecer sin previo aviso. En medio de esta carrera, por demás hilarante, descubrirá no sólo una conspiración y una red de mentiras, sino también el amor verdadero.

La fotografía del señor Calvino, con su sonrisa amable y su postura despreocupada, me acusa desde la página en la que busco mis libros. Su novela me ha gustado, no puedo negarlo, pero me ha dejado una sensación extraña, como si hubiesen pasado meses y hubiese terminado diez novelas diferentes de diez diferentes autores; a veces tenía la sensación de leer a Albert Camus, a Jorge Luis Borges, a Juan Rulfo, entre otros que no recuerdo o no reconocí. Creo que es esto lo que me perdió un poco, porque igual que el Lector cada vez me confundía más: llegaba a un punto en que había alcanzado la comodidad y quería saber qué sucedía, seguía avanzando y me encontraba con algo totalmente diferente, y el desconcierto del Lector era también mío.

Y entonces, a partir de la segunda mitad, empecé a encontrarle el ritmo, a leer más rápido y encontrar el truco tras los cambios sucesivos. Me encontré con varias alusiones al acto sexual y escenas de sexo como tal, pero no eran explícitas ni abordadas como tema central. Si llegué a sentirme incómoda en un momento es simplemente porque aún soy joven y leer sobre sexo es aún un continente oscuro, pero pude relajarme pronto y ver el sentido cómico que el autor trataba de expresar. Porque tiene, sin duda alguna, la escena de sexo descrita de la manera más curiosa que pensé en encontrar jamás, y logró sacarme unas cuantas carcajadas porque en mi vida creí que alguien en el mundo pudiese verlo de esa manera.

Me cuelgo de las propias palabras del autor y digo que es, sobre todo, un libro sobre el placer de los libros y de la lectura. Resultó ser más mucho más profundo y filosófico de lo que yo había pensado, y da pie a muchas instancias de reflexión. Puede que me haya mareado en diversas ocasiones, pero es definitivamente una gran novela, muy original y extraña, que me ha motivado mucho a retomar la escritura, y en algún momento no muy lejano volveré a leer algo del autor.


Sobre el autor
Escritor italiano. Nacido en Cuba, de padres italianos, Calvino se trasladó a Italia en su juventud. Después de la II Guerra Mundial, durante la que luchó contra los nazis en un grupo de partisanos, se licenció en Literatura y realizó trabajos editoriales. Su primera novela, El sendero de los nidos de araña (1947) era realista. Luego utilizó técnicas alegóricas en novelas como El caballero inexistente o El vizconde demediado (1952-1959). En obras posteriores, como Las cosmicómicas (1965), Tiempo cero ( 1966), Si una noche de invierno un viajero (1979) y Mr Palomar (1983), queda patente la original mezcla de Calvino de fantasía, curiosidad científica y especulación metafísica.
18 de enero de 2013

Nuevos Retos 2013: Nostalgia y Primeras Impresiones

No deseo comprometerme con mucho a la hora de sumarme a un reto, y en general trato de buscar alguno que coincida con las listas que ya tenía desde antes. Es así como, y después de explorar por algunos blogs, logré dar con dos que me parecieron interesantes.

Back to HogwartsEl primero, es el desafío Back to Hogwarts, del blog Lee.Sueña.Vuela. Comencé con las novelas de Harry Potter cuando tenía unos ocho o nueve años, y leía sin parar, incluso amaneciéndome, hasta que terminé el quinto libro. Entonces, esperando la salida del sexto, comencé a interesarme por otro tipo de literatura, otros géneros y otros autores, y jamás llegué a finalizar la saga.

Gracias al mismo blog, descubrí Pottermore, un sitio dedicado al mundo de Harry Potter muy entretenido, y ha sido sencillamente un puñetazo de nostalgia. Así pues, y ya que es uno de esos retos flexibles, sin límite de tiempo, me he propuesto terminar de una vez lo que empecé.

  1. Harry Potter y la Piedra Filosofal.
  2. Harry Potter y la Cámara Secreta.
  3. Harry Potter y el Prisionero de Azkabán.
  4. Harry Potter y el Cáliz de Fuego.
  5. Harry Potter y la Orden del Fénix.
  6. Harry Potter y el Misterio del Príncipe.
  7. Harry Potter y las Reliquias de la Muerte.

Y además, como bonus:

  1. Quidditch a través de los tiempos.
  2. Animales fantásticos y dónde encontrarlos.
  3. Los cuentos de Beedle el Bardo.



Reto John GreenEl segundo el el Reto John Green, del blog Hojitas de Limón, que acabo de conocer y me ha gustado mucho. Conocía a John Green por Youtube, específicamente por éste video, que conocí gracias a este otro. Me olvidé de su existencia por un buen tiempo, hasta que empezó a hacerse reconocido en la blogósfera como autor. Normalmente, si no siento ese no-sé-qué cuando veo un libro, o es una recomendación de alguien con gustos muy similares, hago caso omiso y sigo con mi vida. Pero este señor me ha tenido perturbada bastante tiempo, he estado tratando de convencerme a mí misma de que no es mi estilo, y aunque suene bien estúpido, me ganó cuando vi su fotografía en Google. Es una debilidad el colmo de ridícula, pero es imposible que yo deteste a un escritor al que le he visto la cara. Me ha pasado montones de veces.

El reto consiste en leer un mínimo de dos y un máximo de cinco libros de John Green durante este año. Dejo el número abierto debido a que estoy dando pasos de ciego, ya que no conozco la pluma del autor y no me he formado una opinión respecto a su estilo. De todas maneras, adjunto la lista:


  1. Bajo la misma estrella.
  2. Paper Towns.



17 de enero de 2013

Papaíto Piernas Largas, de Jean Webster

Entre los libros de la infancia de muchas personas de mi género, tengo la certeza que éste se encuentra, de una u otra manera. Yo, por lo menos, no oí hablar de él hasta que estuve en mi último año de colegio, y en un principio no supuso un mayor interés.

Una de mis librerías favoritas tiene libros que no suelen verse, con ediciones extranjeras que no llegan a las de mayor prestigio. Es un lugar pequeño, con la mayoría de sus libros en delgados estantes y otro tanto amontonado en el suelo. Fue un día que paseaba por ahí y que no pude resistir entrar a mirar un rato, que encontré Papaíto Piernas Largas, de Jean Webster, en uno de los estantes, al parecer recién llegado. Obviamente, como librería pequeña e independiente, no tenían muchas copias. Después de darle unas vueltas, me decidí a comprarlo.

¿Alguno de ustedes lo ha leído? Hace unos días acompañé a mi hermana a un gimnasio, y mientras la señora que estaba aen la mesa a mi lado veía una película increíblemente ruidosa en su computador, yo me sumergí en la lectura, después de tener la pobre novela guardada varios meses.


Sinopsis
Judy, una niña abandonada, ha vivido sempre en un hogar de huérfanos. Cuando, a los 18 años, debe comenzar a valerse por sí misma, se produce un inmenso cambio en su vida. Uno de los directores del hogar, quien desea guardar el anonimato, la envía a un internado universitario para que continúe sus estudios, proporcionándole todos los medios para ello. Así, junto a las demás estudiantes, Judy deberá adaptarse a un mundo desconocido para ella.

Opinión Personal

Judy acaba de terminar sus estudios escolares, y tras 18 años, sigue en el anticuado orfanato John Grier, donde trabaja por su estadía. Un día, la solicitan en la oficina de la matrona, y mientras baja las escaleras, alcanza a ver a uno de los benefactores que se ha quedado rezagado. Sólo ve su espalda, pero nota que posee unas piernas muy largas, lo que le recuerda a una araña "papaíto piernas largas". Es la matrona quien luego le cuenta que aquel hombre se ha convertido en su tutor, y que le enviará a la universidad para que se convierta en una escritora. La única condición es que le envíe cartas mensualmente, como muestra de agradecimiento, que por supuesto él no responderá, debido a su decisión de permanecer en el anonimato. Sin saber cómo dirigirse a este desconocido, Judy comienza a llamarlo afectuosamente Papaíto Piernas Largas en sus cartas, en recuerdo de su altura.

Tras años sin gozar de privacidad y libertad, y sin viajar y conocer el mundo más allá del orfanato, todo supone una maravilla para la joven Judy. Comienza sus estudios en la universidad, donde pronto hace amigas con las que compartirá durante los siguientes cuatro años.

Es una novela epistolar, su historia contada a través de las cartas de Judy a Papaíto Piernas Largas, dotada de graciosas ilustraciones de la autora. El lenguaje es sencillo y ameno, y la lectura muy rápida. No tardé en encariñarme con Judy, que es una chiquilla alegre y creativa, muy amistosa, y que pese a tener un benefactor rico, sigue siendo humilde, sencilla y muy agradecida. Son evidentes los contrastes con sus amigas, Sallie y Julia, debido a que ambas han nacido en familias con padre y madre, y cuentan con una posición social diferente, sobre todo Julia, que pertenece a una familia muy distinguida. De Papaíto no sabemos nada hasta el mismo final, excepto de que pese a la distancia que supone el anonimato, es un ser preocupado y bondadoso, y supone la única noción de familia que Judy conoce.

Las aventuras de Judy en la universidad, con sus compañeras, durante sus vacaciones y pequeños viajes, me han encantado. Disfruté mucho leyendo esta divertida novela, y el final es simplemente perfecto. Es muy tierno, muy bonito, y el broche de oro para un libro que definitivamente tendría que haber conseguido antes.

Sobre la autora
Jean Webster nació en Fredonia, New York, en 1876. Escritora norteamericana, fue autora de muchas novelas, las más conocidas protagonizadas por jóvenes agradables y su madurez intelectual, moral y social, siempre dotadas de una buena dosis de humor. Entre sus obras más destacadas se encuentran Papaíto Piernas Largas (1912), y Mi Querido Enemigo (1915).
11 de enero de 2013

No es país para viejos, de Cormac McCarthy

A la hora de elegir un libro soy increíblemente cauta. Lo pienso dos, tres, mil veces antes de darle el sí a un libro. Excepto si recibo una recomendación de alguien con gustos muy similares a los míos. Como mi padre, por ejemplo. Él vio la película No country for old men, de los hermanos Coen, la cual está basada en la novela de Cormac McCarthy. Cuando me llevó a la Feria Internacional del Libro de Santiago me dijo este libro es brutal, te va a gustar, y me describió una escena mientras caminábamos entre los stands.

Después de pensarlo y dar un par de vueltas, lo tomé y lo compré. Aparte de lo que mi papá me dijo, no tenía idea de qué se trataba, y la película la conocía por un chiste que vi en Cracked una vez. Por lo que cargué con las bolsas de libros hasta mi casa ansiosa por revisarlos, y una vez me puse cómoda e hice un espacio para sentarme en el desastre de mi pieza, comencé a pasar las páginas de mis nuevas adquisiciones literarias. Cuando llegó el turno de No es país para viejos, que venía sellado, me encontré con un marcador a juego escondido en su interior.

Cuando recibía las habituales llamadas de mi padre, él me preguntaba si ya había leído el libro. Pasó un tiempo antes de que pudiera decirle que sí, que al fin estaba leyéndolo. Y cuando nos volvimos a encontrar, yo estaba con el libro en mi mochila, y le mostré la página exacta donde estaba la escena que él me había contado meses antes.

Sinopsis
El cazador y veterano de Vietnam Llewelyn Moss descrubre por casualidad la sangrienta escena de una carnicería entre narcos en algún lugar de la frontera entre Texas y México. Entre los cuerpos y los paquetes de heroína, descubre también algo más de dos millones de dólares. A partir de este momento comienza la violenta carrera de Moss por escapar de los que quieren darle caza: Wells, ex agente de las Fuerzas Especiales contratado por un poderoso cartel; Anton Chigurh, una implacable máquina de matar, para quien recuperar el dinero de sus jefes es apenas la excusa para descargar una y otra vez su arma y poner en práctica su máxima: no dejar nunca testigos; y un sheriff veterano de la segunda guerra mundial que añora los buenos tiempos y esconde un doloroso secreto que lo mantiene vivo.

Opinión Personal
Me gustó que es increíblemente brutal. Es una crítica cruda, una reflexión, una historia descarnada que refleja los horrores de la sociedad actual sin rodeos. El estilo de narración es bastante particular, sencillo, sin largas e innecesarias descripciones de todo. Va directo al hueso. Tiene a confundir, eso sí.

Los personajes son muy reales. Es una de esas novelas bien especiales en que hasta el asesino psicópata que trata de sacar del camino al personaje que más cariño le tienes te mantiene con el corazón en un hilo cuando le disparan.

Aquí cualquiera puede morir, y ningún personaje tiene la vida comprada. Eso me gustó, aunque por supuesto me dejó con una sensación de injusticia para cuando llegué al final del libro. Pero una vez más, el realismo es impresionante, y la vida nunca ha sido justa. Lo que no quita que haya pasado la mayoría de la lectura albergando una leve esperanza de que las cosas acabaran algo mejor, pero ahora puedo decir de primera mano que cuando uno se encuentra en la primera página con la memoria de una ejecución, las probabilidades de un final relajado son ínfimas.

Comienza como una loca huida de gente peligrosa principalmente gracias a las drogas y al dinero involucrado. A medida que avanza la lectura, para mí se iba transformando en un análisis del mundo en que vivimos, en una añoranza de los tiempos pasados, pese a ser apenas un poco mejores que los actuales, del comienzo de la vejez y lo que ello implica. Cómo todo va degenerándose a pasos agigantados, cómo hay leyes por encima de nosotros y cosas que no pueden evitarse. No quiero decir con esto que no haya acción después, porque por supuesto que la hay. En cada momento. Avanza rápido, pero en mi humilde opinión es una lectura densa, y yo prefiero tomarme mi tiempo con libros de este tipo.

Lo he disfrutado muchísimo, y ha sido todo cuanto esperaba y aún más. Ahora es de madrugada. Pero tal vez al mediodía, antes de ponerme a improvisar un almuerzo decente, llame por teléfono a mi padre y le cuente que he terminado la novela, y quedemos de acuerdo para ver la película, o algo por el estilo.


Sobre el autor
Comarc McCarthy es un novelista y dramaturgo norteamericano nacido el 20 de julio de 1933 en Providence, Rhode Island. Entre sus obras más destacadas se encuentran Meridiano de Sangre (1985); la Trilogía de la Frontera (1992-1998); No es país para viejos (2005), que fue adaptada al cine en 2007 por los hermanos Coen; y La Carretera (2006), por la cual fue galardonado con el premio Pulitzer en 2007.
6 de enero de 2013

Premio-Campaña: Fomentando la lectura

Alguna vez tuve un blog donde subía mis propios relatos, sin embargo, fue bien poco lo que duró. El bloqueo escritor me atacaba demasiado seguido como para actualizar como corresponde, y abandoné mi viejo blog a su suerte, porque simplemente no podía continuar. Por esta razón, y después de descubrir los blogs literarios, lo medité un par de millones de veces antes de volver a tener un espacio en internet.

El último empujón me lo dio un blog que encontré por casualidad buscando ya ni recuerdo qué en Google. Ese blog fue Qué leería Jane Austen, que había abierto sus puertas hacía tan sólo unos meses. Y es ese mismo blog el que me ha otorgado este premio, que me ha dejado muy feliz y que ha sido otra razón más para convencerme de que hice bien en abrir el mío propio.

Las instrucciones a seguir son publicar la imagen de la campaña y nominar a diez blogs y avisarles para que continúen con ella. Voy a tomarme ciertas libertades con lo de la nominación, y le otorgo el premio a cualquiera que quiera aceptarlo y continuar con la campaña. Sé que no es mucho la idea, pero lo prefiero así.

Por último, se debe responder la siguiente pregunta: ¿qué libro aconsejamos para alguien que comienza a leer? Existe una infinidad de libros que recomendaría, pero finalmente me he decidido dividir mis recomendaciones en dos categorías: clásicos universales y nacionales.

Entre los clásicos, recomiendo sin duda alguna El Principito, de Antoine de Saint-Exupéry, y Juan Salvador Gaviota, de Richard Bach. Ambos son libros con un fuerte contenido simbólico, grandes enseñanzas y una alta dosis de esperanza para vivir y cumplir nuestros sueños. Además, destaco la particularidad de que siempre, incluso si es una relectura, aprendemos algo nuevo al leerlos.




Y entre los nacionales, dos series de libros que leía cuando niña y que me entretenían como nada en el mundo. Me refiero a los frutos del ingenio de Ana María Güiraldes y Jacqueline Balcells. Mis favoritos, sin duda alguna, eran Aventura en las Estrellas y Querido Fantasma. El primero, una historia de ciencia ficción en que el lector debe decidir las acciones del protagonista, y acorde a las mismas será el final que obtiene; el segundo consiste en una recopilación de relatos de misterio donde el lector, interpretando las pistas, resolverá el caso. Me divertían muchísimo, agudizaron mi capacidad de atención en los detalles y fueron un increíble incentivo para leer aún más.



1 de enero de 2013

Reto 2013: English Books

Tengo una lista de libros pendientes considerable. Después de decidirme a sacar todos los libros de mi casa de sus correspondientes estantes, ordenarlos y anotarlos en una lista, llegué a un número sin leer demasiado grande para mi gusto. Por lo mismo, y para motivarme a disminuir esa cifra, he decidido unirme a varios retos.

El primero al que me he sumado este año es el que propone el blog Luminous Words, que simplemente propone leer libros en inglés, independiente de la cantidad. Mi idea es leer muchos en dicho idioma, pero por el momento indicaré sólo los pendientes, y a medida que vaya adquiriendo otros, iré actualizando la lista. 

Por el momento, los libros que leeré son:

  1. Persuasion by Jane Austen.
  2. Pride and Prejudice by Jane Austen.
  3. Duma Key by Stephen King.
  4. House of Leaves by Mark Z. Danielewski.
  5. Weird Things Customers Say in Bookshops by Jen Campbell.
  6. The DUFF by Kody Keplinger.
  7. Midnight in Austenland by Shannon Hale.
  8. Cranford by Elizabeth Gaskell.
  9. The Search for WondLa by Tony DiTerlizzi.
  10. More Weird Things Customers Say in Bookshops by Jen Cambell.
  11. Darth Vader and Son by Jeffrey Brown.
  12. The Twits by Roald Dahl.
  13. Winger by Andrew Smith.

Siendo House of Leaves más una probabilidad, porque como mostraba en su fotoreseña, no es una novela que pueda leerse de la misma forma que cualquier otra. 

Anna and the French Kiss, de Stephanie Perkins

¿Qué puedo decir? Me pilló volando bajo. Había pasado meses revisando blogs contando las mil maravillas sobre este libro, y cuando supe de qué se trataba, pensé: esto no es para mí. 

La pregunta del millón, sin duda alguna, es qué fuerza sobrenatural me llevó a guardarme en el bolsillo cualquier prejuicio hacia la novela romántica que pudiese sentir, y darle una oportunidad. Bueno, esa fuerza tiene nombre y apellido: Pablo Neruda. 

Me puse a revisar la página oficial de la autora, Stephanie Perkins. En la sección de extras, descubro que tiene una lista con autores y lecturas recomendadas, ordenadas por género. Encontré bastantes sorpresas, pero sin duda la más grande fue esta:

Pablo Neruda – my favorite classic poet. Try anything.

Pregunta siguiente, qué hacía viendo su página si dije que no me interesaba el libro. Buscaba algunas fotografías de París en Tumblr, y apareció una frase de Neruda, con el tag del libro puesto abajo, y el shock fue inmediato. ¿Algún fan loco relaciona la obra de Neruda con esta novela, o será cosa de la autora? Ahí fue donde me decidí por lo más seguro.

Hice una pequeña pausa con el libro que ya estaba leyendo, y empecé a escuchar el audiolibro en inglés. Al final terminé leyéndolo en el computador y el celular, en un documento pésimamente traducido, y hoy, en una clínica de urgencias, un automóvil de un tío que acabo de conocer, y el departamento de mi padre, terminé la lectura, en las primeras horas de este nuevo año.

Sinopsis
La torre Eiffel, Amélie y un montón de reyes que se llaman Luis. Esto es todo lo que Anna conoce de Francia. Por eso, cuando sus padres le anuncian que pasará un año en un internado de París, la idea no acaba de convencerla. Pero, en la Ciudad del Amor, conoce al chico ideal: Étienne St. Clair. Es listo, encantador y muy guapo. El único problema es que también tiene novia.

Opinión Personal
Cualquiera como yo, que no disfruta del romance como la mayoría de las mujeres, habría pensado que un libro así me haría perder el tiempo. Pero parte por la entretenida narración en el audiolibro, parte por mis deseos de probar algo distinto, decidí darle la oportunidad.

Anna Oliphant es enviada a una escuela en París por su padre, novelista best-seller, a quien se le han subido los humos a la cabeza y piensa que una hija estudiando en Europa da más clase a su biografía. Anna, incapaz de hacer valer su propia opinión, se encuentra de pronto en un país que no conoce, con un idioma que no domina, y ningún conocido en quién apoyarse. Comienza a bajar las revoluciones cuando una joven en la habitación de al lado, Meredith, toca su puerta, le brinda su amistad y le presenta a sus amigos. De pronto, Anna ya no está sola.

Étienne St. Clair es uno de los amigos de Meredith, y al principio me pareció simplemente Don Perfecto, el típico hombre apuesto, popular y que derrite a todas las mujeres con una sonrisa. Pero cuando uno avanza en la historia, descubrimos que Étienne es más que una cara bonita, sino que es un buen amigo, muy divertido y que tiene muchos problemas y miedos que prefiere esconder detrás de su sonrisa de pasta de dientes. Se hace muy cercano a Anna, y juntos gozan de una amistad sin precedentes.

Anna, por otro lado, prefiere mil veces conservar a su amigo querido, que albergar esperanzas en el ámbito romántico, que ante todo considera inapropiadas porque él ya tiene novia. Así pues, a través de sus ojos vemos como él le enseña a salir y oler las rosas, como se apoyan con sus problemas y una gran cantidad de situaciones divertidas, amenas e hilarantes. La parte romántica a la que yo tanto le tenía miedo aparece en todo su esplendor en el último cuarto del libro. Así pues, es un amor que se cocina a fuego lento, muy creíble y nacido de una fuerte amistad, y no de la nada.

Cabe destacar que el amor dentro de la novela se extiende aún más, hacia el amor fraternal. La consideración por los amigos, el desear lo mejor para el otro aunque uno no consiga lo que quiere, las dificultades y falta de comprensión en familias rotas y disfuncionales. Este último tema, el de la familia, me ha interesado mucho, sobre todo el tema de los padres. El de Anna, a veces padre sólo por título, ausente y cuando presente totalmente ajeno al verdadero sentir de los hijos; el de Étienne, maniático del control y esclavo de las apariencias. Recordaba a mi propia familia en incontables ocasiones, pensando cómo encontraba parecidos por aquí y por allá. Eso, sin duda alguna, ayuda a conectar mucho con la historia, porque uno llega a comprender por qué los personajes son como son.

Y por último, la soledad también juega un rol importante. Esa necesidad de hacer cosas que no te parecen tan bien, porque no quieres sentirte solo, ese miedo terrible a la soledad y el rechazo que cualquier mínimo cambio en tu vida pueda acarrear.

No, no me enamoré de Étienne St. Clair como muchas otras blogueras. Tiene sus trabas, por supuesto, lo que añade profundidad al personaje, pero no es el tipo de perturbado que a mí suele gustarme. Basta que diga que después de pensarlo mucho, creo que el único que me ha dejado wow es Scott Landon, el escritor desquiciado, inteligente y pajarito con alas rotas de La Historia de Lisey, de Stephen King.

Por supuesto que hubo temas que no me gustaron cómo se trataron, como el sexo, que aunque no llega a consumarse en momento alguno es nombrado de una manera que no llega a agradarme. No es una novela madura, al fin y al cabo son adolescentes y es el debut de la autora. La Historia de Lisey trata el sexo como un medio para llegar a la trama principal, u otra sub-trama, y no como la mortificación de sí lo hizo, no lo hizo. Pero no podemos comparar la diferencia de experiencia de los autores y el tipo de público al que apuntan, claro.

Resumiendo, el libro me gustó. Probablemente no pase a la historia de la literatura y se consagre como un clásico en el género, pero es entretenido y es muchísimo más de lo que aparenta. El estilo de la autora es muy fresco y ameno, y sinceramente espero que la experiencia y madurez que vaya adquiriendo como escritora publicada se refleje en su futura prosa.

Sobre la autora
Stephanie Perkins nació en Carolina del Sur, creció en Arizona y fue a la universidad en San Francisco y Atlanta. Siempre ha trabajado con libros: primero como librera, después como bibliotecaria y ahora como escritora de literatura juvenil. En la actualidad vive en las montañas de Carolina del Norte, y es autora de Anna and the French Kiss (2010), Lola and the Boy Next Door (2012) e Isla and the Happily Ever After, aún por publicar.
 

Blog Template by BloggerCandy.com